Reconocemos la Educación como proceso dinámico y como hábito. Valoramos y cultivamos lo permanente que hace a la esencia de la persona y su formación en los valores y estamos atentos a los cambios continuos de la realidad física y social que nos permite adaptarnos a sus necesidades.
Asimismo a los cambios que nos presenta la Universidad de Cambridge y a las necesidades que surgen de las adaptaciones según requerimientos de nuestras Universidades privadas con las cuales mantenemos convenios. Nuestro plan, también articula con los requerimientos de la propuesta de ingreso de la Universidad de Buenos Aires
En este proceso, contemplamos que la persona asimile lo cultural y moral y se diferencie desde lo personal. Guiamos al alumno para que descubra sus cualidades, talentos, gustos e intereses, sus formas de trabajo, su originalidad y creatividad.
Contribuimos en la formación de una persona íntegra que con esfuerzo desarrolla sus capacidades espirituales, cognitivas, físicas, sociales y artísticas, sus propias competencias y asume y supera sus limitaciones. Una persona que con responsabilidad y compromiso, asume su proyecto de aprendizaje.
Propiciamos que el alumno descubra y desarrolle su potencial para que logre su equilibrio psicofísico, domine su voluntad y desarrolle competencias que le permitan en su futuro proseguir estudios superiores, trabajar, elegir su proyecto de vida y encontrar su manera de trascender.
Educar es preparar a nuestro alumno para desempeñarse en el mundo de los adultos y adaptarse a los desafíos que esto implica; preparado para tomar decisiones correctas en su vida personal, familiar, social y ciudadana.
Para lograr lo expresado, priorizamos y trabajamos en el fortalecimiento de su autoestima tendiente a su autonomía para que pueda actuar con seguridad, en forma organizada, con límites claros acordes a su edad, con una identidad bien definida y un sólido sentido de pertenencia familiar, escolar y nacional, que facilite su orientación vocacional.